google-site-verification: google73c5015e9866507b.html

jueves, 16 de septiembre de 2010

¿Los superticiosos tuvieron razón?



Pues el miércoles Ciro Gómez Leyva se fue por la libre con el siguiente texto:

¿Cómo se describirá en 30, 40 años al 2010 mexicano? Es probable que la primera referencia tenga que ver con el momento más agudo de una guerra civil entre el Estado y bandas criminales pulverizadas (que a su vez se mataban entre sí) con una capacidad de fuego, multiplicación y brutalidad que llenaba de horror, dolor y miedo a más de 100 millones de habitantes y descomponía a México todo.
Para los historiadores y sociólogos, el 2010 podría ser el año con más mexicanos ejecutados a manos de mexicanos en cerca de un siglo. El año emblema de una carnicería, etiquetada como “guerra contra el crimen organizado”, que en menos de una década podría cobrarse 100 mil vidas.
Detesto decirlo, pero los supersticiosos que jugaban con la carambola violenta 1810-1910-2010 terminan teniendo de alguna manera la razón. Los festejos del Centenario y el Bicentenario ocurren en medio de una guerra modelo siglo XXI.
Porque, qué otra cosa es una guerra sino rompimiento de la paz, lucha armada entre bandos, ataques sin intermisión, sangre, víctimas inocentes, viudas y huérfanos, economías despedazadas, proyectos cancelados, exilio, tensión extrema.
El frente de batalla puede estar en Tamaulipas, los límites entre Durango y Coahuila, Juárez, Nuevo León, pero los coletazos se sienten en prácticamente toda la República y tienen sumidos a los mexicanos en lo que ayer, aquí, León Krauze caracterizó como un “nihilismo desorientado y depresivo”.
Sabemos quiénes terminaron imponiéndose en las guerras que comenzaron en 1810 y 1910. Ojalá los historiadores y sociólogos den cuenta del absoluto triunfo del Estado mexicano sobre las bandas criminales del 2010. Victoria que hoy se ve más difícil que la del Monte de las Cruces o la toma de Zacatecas.

El maestro Obiwan contestó:


Cierto Ciro, una extraña y siniestra coincidencia enmarca el festejo del bicentenario del inicio de la independecia muertes por balas, decapitados, desmembrados, cuerpos molidos, desvanecidos por ácidos, cocinados serruchados, etc. Variedades de muerte y tortura que muchos no imaginábamos. Ajustes de cuentas, operativos mal realizados y traiciones son la constante. Miles de muertes sí, y en esta vorágine mortífera los siempre responsables medios e informadores hacen apología de la guerra contra el narco.



Claro que cuestionan las formas de los criminales, pero lo hacen con tibieza, haciendo una somera mención de los involucrados, "con los narcos mejor no meterse" parecen pensar. No así ocurre con los errores del ejército y fuerzas policiales que invariablemente son mordazmente cuestionadas por todas las instituciones políticas, gubernamentales de oposición y la inmaculada CNDH, en la que curiosamente los detractores del gobierno y medios coinciden por unanimidad "tenemos en esta la única institución de primer mundo en México", sus recomendaciones (según ellos) se basan en investigaciones infalibles. Esta ONG es el defensor de oficio favorito de los delincuentes, aquellos que violaron, secuestraron y ultimaron víctimas de la manera más deleznable que su mente pueda dictarles, siempre les brindará abrigo. De todos sus logros los medios dan puntual seguimiento, incisivos como son cuando persiguen contratos y patrocinio muestran esta parte de la verdad para evidenciar con exageración los errores del mal gobierno y callar con alevosía las acciones de los delincuentes y omisiones de gobiernos coludidos con ellos al tenor de "ataquemos al gobierno, ellos no nos van a secuestrar y poner mantas en la calle".



Completamente cierto Ciro, los muertos ya suman miles, pero qué sabíamos antes de que ustedes comenzaran su desinteresada contabilidad, eran sólo 10 las personas que morían en estas circunstancias?, Los Estados del norte eran el Amsterdam de México? y Los Narcotraficantes honorables hombres de negocios?, sabemos que no. Este contraataque que inició el actual gobierno respondió al clamor popular de seguridad y paz, pues la guerra entre narcos ya existía con sus altísimos daños colaterales, y hoy gracias a medios y Narcos de Closet como políticos y medios la lucha se ha desprestigiado. De no haberse iniciado esta lucha "sin sentido" dicen algunos, quizá estaríamos festejando en el Bicentenario el primer aniversario del derrocamiento del régimen democrático y la instauración de la Narco Mediocracia, donde todo sería libertad, igualdad y fraternidad, y donde Televisa, PRI, Chapos y Zetas estarían en el consejo de seguridad. 



Un enorme saludo y solidaridad con Monalisa 74 e Isabellevic, grandes y valientes mujeres.



Feliz Bicentenario a todos nuestros hermanos mexicanos!

Mi participación fue la siguiente:


Obi, 



Lo que vemos son muchas recapitulaciones de nuestra pasada historia. Para el enemigo, el narco, nuestro silencio. Para el gobierno -el que sí hace algo, no los gobiernos que sólo se hacen patos; me refiero al legislativo, al judicial, y a muchos estatales- nuestra crítica implacable; para quienes nadan de muertito, nuestra indiferencia. 



Insisto en apuntar que es la misma actitud que se tuvo cuando Napoléon III sumó a México a su lista de conquistas usando a un tonto útil, Maximiliano -quien no tenía más que las mejores intenciones-. ¿Se enfrentó México en unidad contra este enemigo común? Por supuesto que no. Todos tenían una excusa. Todos preferían servir a un señor extranjero antes que sumarse a una causa común. 



Pero Lincoln, el mismo Lincoln que se había opuesto a la guerra de 1845 con México, ya se había puesto como tarea sacar a Francia de México tan pronto terminara la guerra civil. No pudo hacerlo. Fue asesinado. Pero el general Grant estableció el escenario par que el ejército de Juárez se abasteciera en la frontera, y pudiera deshacerse del invasor. 



Sostengo que los medios no han estado a la altura de esta lucha. Las causas son motivos de especulación, pero su falta de ideas, de inteligencia, de solidaridad, de compasión, ha sido la norma. 



Yo sin embargo creo que hay muchos motivos para el optimismo. México no está ya en riesgo de perder porciones de su territorio, como en un momento pudo ocurrir. Lo que sí urge es pedir cuentas a los impresentables gobiernos de Tamaulipas, Chihuahua y Nuevo León, cuya colaboración criminal con el crimen organizado no puede ser soslayada. 



En este caso, como en los anteriores, confío que quienes amamos a este país, y nuestros aliados, estaremos por encima de la mezquindad, el egoísmo y la simple estupidez.


Kratos, finalmente, también colaboró;

Monarca de Mongo, tiene gran razón, pero es quizás la naturaleza mexicana lo que nos tiene impávidos ante el gran problema que enfrentamos, esperando que otro Lincoln venga a resolver nuestros problemas, tal vez la gente aceptaría que tropas extranjeras o de la ONU patrullaran las pacíficas calles de Reynosa y Juárez, pero qué podríamos esperar de los dueños de México, Gobernadores, Alcaldes, Narcotraficantes y Medios, al ver que sus intereses y complicidades serían descubiertos por agentes extranjeros, no tendrían el poder ni el dinero suficiente para acallar a los medios internacionales, sería el fin del chayote. Es triste ver a través de su escrito cómo hay en ocasiones más intención de ayudar a México por parte de algunos extranjeros que por los connacionales, quienes se benefician de su ruina.

Por lo pronto, Feliz Bicentenario!!!