En la medida que la sucesión se acerca, los ciudadanos nos vemos en la obligación de votar por un nuevo titular del poder ejecutivo, y al respecto sorprende la ligereza con la que se emiten ciertos dichos.
En el blog siempre hemos sostenido que, si bien en lo individual tenemos nuestras preferencias, el sitio como tal no pretende inscribirse en un partido político particular. Ahora bien, dado que nuestra función es informar creo que es justo explicar por qué pienso que Vazquez Mota es, con mucho, la mejor candidata.
Su candidatura está rodeada de misoginia. En el foro de Milenio, por ejemplo, Barman lapidó las siguientes frases sobre Vázquez Mota:
La Sra Vázquez no es más que otra oportunista de la política mexicana. Llegó de la mano de Fox a probar las mieles de la alta burocracia y a partir de ahí ¿qué ha hecho por el país?
¿Qué hizo como Secretaria de Desarrollo Social?
¿Qué hizo como Secretaria de Educación Pública?
¿Y con eso quiere ocupar la jefatura del ejecutivo?
Ojo, de los seis maratonistas azules, uno es priísta en el fondo y en la forma, es el titular de la Secretaría del Trabajo, quien tomo los ideales del panismo a partir de junio de 2007.
Los maratonistas azules son en realidad, amateurs de medio fondo pero veloces corredores de los 12 años de panismo. Algo asi como 400 metros con obstáculos.
Uno lee tanta seguridad en las palabras de Barman que pudiera pensar que sabe de lo que está hablando, cuando los hechos son enteramente diferentes. Nunca he visto que Barman, quien no es obradorista, pida sin embargo resultados a este para justficar su candidatura. Parece que lo que es un deseo legítimo en un hombre, en el caso de la mujer sí debe de estar justificado.
Aunque todos los pronósticos de las novatadas la incluyeron, por su cero experiencia en la administración y sus vínculos con el empresariado conservador, para el que había trabajado como promotora de la superación personal, la titular de la Secretaría de Desarrollo Social despuntó como interlocutora de los experimentados gobernadores priistas y fue consiguiendo el sí de funcionarios, académicos, intelectuales y comunicadores de signo progresista, de los que se hizo rodear, hasta sustituir el equipo original, que respondía a cuotas de la llamada derecha.
Encargada de 2000 a 2005 de duplicar el padrón del programa heredado del régimen priista, Vázquez Mota remozó el Progresa como Oportunidades, armó un blindaje internacional que lo calificó como plan de vanguardia y certificó haber reducido en 30 por ciento la pobreza.
Sobre su trabajo como secretaria de educación, también surgen historias interesantes:
Una anécdota revela la rudeza que alcanzó aquel difícil trato: en diciembre de 2008, Vázquez Mota le regaló al diputado perredista Tonatiuh Bravo Padilla el llavero de una Hummer, en alusión a la docena de camionetas que Gordillo había repartido a sus fieles.
En el juego de vencidas que ambas protagonizaron, la funcionaria probó golpear a la lideresa decretando la muerte del reparto de plazas en la Secretaría de Educación Pública y, entre otras tácticas, ninguneó a su yerno, el subsecretario de Educación Básica, Fernando González.
Elba Esther armó una contraofensiva que halló eco en un nuevo negociador, el todavía titular de Gobernación, Juan Camilo Mouriño. Y ganó.
De modo que Vázquez Mota no fue la “perita en dulce” con “la maestra” que a veces se quiere presentar.
Las estadísticas del reporte sobre las cuestiones de pobreza extrema demuestran que, de hecho, ha habido una reducción de 24,2 por ciento a 20,3 por ciento en el número de personas que viven en pobreza extrema de México”, aseguró James Wolfensohn, presidente del Banco Mundial. “La pobreza moderada también se ha reducido de 53,7 por ciento a 51,7 por ciento; éstos son movimientos importantes en un momento en el que el crecimiento económico fue significativamente desafiante”.
El estudio señala que en la última década, el patrón de cambios en la pobreza ha seguido de cerca el ciclo macroeconómico y el ritmo asociado al mercado de trabajo. Indica que la crisis de 1994-1995 constituyó un enorme revés: la pobreza extrema se incrementó de 21 por ciento de la población en 1994 a 37 por ciento en 1996. Entre 1996 y 2002 la pobreza extrema disminuyó en 17 puntos porcentuales a 20 por ciento, sólo un punto porcentual por debajo del nivel antes de la crisis de 1994.
A partir de 1996, durante el gobierno del presidente Zedillo, empiezan a bajar los niveles de los distintos tipos de pobreza. En ese año había 37.4 millones de personas en condición de pobreza alimentaria, 46.9 en pobreza de capacidades y 69 millones en pobreza de patrimonio.
El gobierno del presidente Fox continuó reduciendo los niveles de pobreza que llegaron a su punto más bajo cuando se contabilizaron 13.8 millones de personas en condición de pobreza alimentaria, 20.7 en pobreza de capacidades y 42.6 millones en pobreza de patrimonio.
Al final del gobierno del presidente Zedillo, 53.7% de mexicanos se encontraba en alguno de los distintos niveles de pobreza y al término del gobierno del presidente Fox llegaba a 47%, que es el porcentaje más bajo en la historia del país. El número total de mexicanos en esta condición sumaba 48.9 millones, según el Coneval.
El aumento actual en los índices de pobreza interrumpe un periodo de 10 años (1997-2006), en los que se había registrado una disminución real y sostenida del número de pobres. Los niveles de pobreza, como parte de ese esfuerzo de carácter nacional, se habían reducido de 70% a poco más de 40 por ciento. Una disminución de 30% en sólo 10 años.
Para Rodolfo de la Torre, director de la oficina que realiza el Informe de Desarrollo Humano del Programa de Naciones Unidas (ONU), en México los niveles de pobreza se empezaron a incrementar a finales del 2007 con el alza generalizada de los granos básicos a nivel mundial que elevó el precio de los alimentos.
¿Conclusión? Vázquez Mota ha contribuido a combatir la pobreza más que tantos personajes referenciados por su supuesto odio a este problema, pero sin dar resultados palpables: me refiero a Obrador, Cárdenas y el Sub Marcos juntos. Sin embargo, por alguna razón todos han encontrado la manera de crear un culto de “luchadores sociales”, a pesar de que con la mano en la cintura podría ponerse dicho epíteto a Vázquez Mota. Ella sí ha dado resultados.
De modo que si usted está a favor de terminar con la pobreza ya sabe por quién votar, pero si es un chairo que no puede sacarse de la cabeza ideas caducas y comunistoides, pues siga haciéndole al tio lolo yendo a plantones y marchas y siga votando por políticos inútiles que solo lucran con causas sociales.