Perdió el PRD en Michoacán
Hasta el momento (16:30 hrs del 14 de noviembre) la noticia del momento es que el PRD perdió en Michoacán.
El PRD perdió estrepitosamente por 9.23% atrás del PRI (35.39%) y 3.79% atrás del PAN (32.67%).
¿Cómo se debe leer esto?
Simple, el pueblo se hartó de dos prolongados gobiernos del PRD en donde el clientelismo político terminó por abrumar a la ciudadanía quien decidió votar por las opciones diferentes que se le ofrecieron y dividió su voto entre el PRI y el PAN castigando así al PRD, PT y Convergencia.
El verdadero significado de estas elecciones es que el capital político que atesoraba el narcolegítimo y sus hordas se diluyó y terminó siendo la tercer fuerza política del estado de Michoacán, así la ciudadanía da por terminada una mediocre gestión de la seudo izquierda en Michoacán.
El PRI ganó, sabido es que gracias a su maquinaria y estrategias ya conocidas, como el acarreo, la intimidación y la compra de votos.
El PAN se mantiene como la segunda fuerza política de Michoacán, los resultados muy parejos con el PRI.
El PRD conquistó la gubernatura de Michoacán en el 2007 para un periodo de 4 años y no por 6, situación extraordinaria pues se buscaba hacer que estas elecciones fueran concurrentes. En aquella ocasión el PRD ganó con un 37.87% contra el PAN (33.38%) y el PRI (24.30%).
Partido | 2007 | 2011 |
| PRD | 37.87% | 28.88% |
| PAN | 33.38% | 32.67% |
| PRI | 24.30% | 35.39% |
| Otros | 4.45% | 3.05% |
En resumen en el PRD hay una desbandada y deserciones por un 8.99% a favor del PRI, que es casualmente el 9% con el que pierde el PRD.
Sin ese retroceso del PRD el PRI sería la tercer fuerza política del estado de Michoacán.
El PAN se mantiene como la segunda fuerza política del estado, pero destacando su incapacidad para ampliar sus bases sociales dentro de la población, mostrando que hasta el momento lo logrado en el 2000 se ha mantenido relativamente igual, retrocediendo un poco pero más o menos igual.
¿Cuál es la razón? Que las voces de la oposición son estridentes y la voz del partido oficial se oye muy poco y en ocasiones sin fuerza.
