Así que comentaré brevemente las mentiras que publica hoy en su blog, no sin antes hacer una aclaración. No hacen falta las distorsiones y las calumnias de Obrador y su camarilla para percatarse de los saldos pendientes en este país; de sus injusticias, sus desigualdades, y sus insuficiencias. Pero si debemos arreglar nuestros problemas debemos comprenderlos tan fielmente como sea posible, y es en este sentido que porros manipuladores como el Vítor, Arreola, y toda su runfla, hacen un gran perjuicio a la nación. En lugar de intentar dirigir la inteligencia y la energía de tantos ciudadanos hacia un empeño fundamentado para mejorar al país, sólo acarrean agua para su molino; esa ruina esperpéntica pero aún peligrosa que es el la secta de López Obrador.
Así es, pues, que pasamos a la calumnia del Vítor de hoy. El propagandista más lamentable de Poway escribe:
“De acuerdo con datos de la Secretaría de Economía, de 2007 a 2009 desaparecieron del padrón federal de registro de empresas e industrias casi 76 mil empresas.
De acuerdo con La Jornada, esto representa casi el 20% de las empresas de las cuales la SE tiene registro.
Sí: con Felipe Calderón desapareció la quinta parte de las empresas registradas con el gobierno federal (el registro es obligatorio, por cierto).”
Bueno, en primer lugar se trata de un plagio de una nota de La Jornada, pero ya sabemos cómo se las gasta el SDP en lo que toca a “investigación independiente”. ¿Es esto cierto? Realmente es lamentable que el poco buen periodismo que se hace en La Jornada se vea opacado por tan mal trabajo como el que sirvió de forraje para Vítor. Él no cree que lo que dice sea verdad, por cierto. Tan no lo cree que el link que da como referencia no lleva ni a La Jornada ni a la Secretaría de Economía, sino a una nota del SDP que dice así.
“De acuerdo con La Jornada, de 86 mil 688 empresas registradas en el sistema de información empresarial mexicano (SIEM) de la Secretaría de Economía en 2007, en 2009 el número bajó a 311 mil.”
Si uno ve el link original en el SIEM uno puede apreciar que, efectivamente, hubo un descenso en el año pasado (2008), pero no con las cifras que se manejan en la nota del SDP (y la Jornada), sino las que siguen: habían 711,243 empresas inscritas en 2007, y 691,835 inscritas en 2008. La variación no es del 20 % sino del 2.6 %. Es interesante observar que en el caso de Jalisco la desviación si se cumple, y fue cerca del 29 %.
¿Por qué la diferencia en la información? Para mí es inexplicable. O mejor dicho, se trata del viejo truco de manipular las cifras para crear ideas en la población. Evidentemente Víctor es consciente de ello, o hubiera dado el link de la Secretaría de Economía, como lo hago yo.
Pero la peor mentira está aún por llegar. Más adelante Vítor escribe:
“La crisis económica, por cierto, no es el factor principal para la desaparición de empresas. Si se observan los datos de la SE desde años antes resulta que a partir de 2001, cuando el PAN llegó al poder, la desaparición de empresas empieza a aumentar cada año.
Con razón a partir del sexenio de Fox empezó a desaparecer la clase media. No puede haber clase media donde no hay empleo y donde las empresas desaparecen.”Sólo hay una forma de definir la declaración de arriba: es pura y sencillamente mentira. En 2001, año de entrada de Vicente Fox, el número de empresas era de 638,300, en 2009 es de 708,856. La variación es casi 10 % positiva, pues (por cierto, es interesante observar que 2009 representa una mejoría del 2008, donde el número de empresas inscritas era de 691,835) En Jalisco, en 2001 había 79,788 en el patrón, hoy es de 93,591 (también con una mejoría relativa al año pasado).
El punto del Vítor, desde luego, es “demostrar” que hay menos empresas desde la entrada de Felipe Calderón. Pero si eso fuera cierto, ¿por qué comenzar en 2007, entonces? Simple, porque entre 2006 y 2007 (momento de transición entre Fox y Calderón) la variación fue positiva: cambió de 671,389 a 711,243.
No voy a discutir si estos datos me perecen excelentes (que no lo creo). Basta demostrar, otra vez, que Vítor engaña y miente a sus lectores creyéndolos demasiado tontos como para no poder descubrir sus chapuzas. No es cierto que “a partir del sexenio de Fox empezó a desaparecer la clase media”. Eso es mentira. ¡En fin! Otro día más en el lopezobradorismo, hasta la victoria siempre.
