Más allá de si estamos de acuerdo con el tema del aborto o no, la declaración del presidente del Pan resulta reveladora y hasta innesperada
El presidente nacional del PAN, Gustavo Madero, aseguró que su partido “no pretende que a la tragedia del aborto se sume la del encarcelamiento de mujeres”, y que por ello Acción Nacional promoverá reformas a los códigos penales estatales para incluir disposiciones que eviten la prisión como castigo a un aborto.
De gira por Baja California, el líder panista recordó que la Suprema Corte de Justicia de la Nación ratificó la validez de las reformas constitucionales de esa entidad y San Luis Potosí en dicha materia.
“Esas disposiciones reconocen el derecho a la vida del ser humano desde el inicio de su existencia, ampliando así el marco de protección de las personas. El Partido Acción Nacional sostiene que el embrión es persona, pues desde el momento de la concepción se produce un código de vida único e irrepetible, núcleo biológico esencial del ser humano hasta su muerte, lo cual hace a ese nuevo ser perfectamente miembro de la especie humana”, sostuvo.
Madero hizo hincapié en que “Acción Nacional no pretende que a la tragedia del aborto se sume a la del encarcelamiento de mujeres, por ello, promoveremos reformas a los códigos penales estatales, para que provean a las mujeres de tratamiento médico integral y para que se incluyan disposiciones que eviten el encarcelamiento a causa de abortos, protegiendo así a las mujeres y a sus derechos”, informó el PAN a través de un comunicado.
El líder panista señaló que el hecho de ser una persona obliga a la sociedad y al Estado a proteger sus derechos humanos. “Más aún, el PAN sostiene que los derechos de las personas vulnerables, con más limitaciones, requieren de mayor cuidado”.
Además, resaltó que “un ser humano en sus primeras etapas de desarrollo debe ser especialmente protegido” y refrendó el compromiso de Acción Nacional con las mujeres y con la construcción de una sociedad en la que los derechos de todos estén garantizados y puedan ser conciliados.
La defensa de los derechos humanos, dijo, “debe incluir la protección de las personas más vulnerables, las no nacidas, reconociendo al mismo tiempo, y sin reservas, los derechos de las mujeres”.
Al referirse a la decisión de la Suprema Corte de Justicia de la Nación de ratificar la validez de las reformas constitucionales de Baja California y San Luis Potosí, dijo que es importante recordar que cambios similares se han realizado ya en 18 estados de la Federación, “y que cada una de ellas contó con el apoyo de mayorías calificadas, conformadas con los votos a favor de legisladores y legisladoras de todos las fuerzas políticas”.
Dijo que estas reformas también tienen un sólido respaldo jurídico internacional como la Convención Americana de Derechos Humanos, el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos y Declaración y la Convención de los Derechos del Niño, de la ONU, “en los cuales la SCJN se ha basado para resolver controversias previas.
Afirma que el niño, por su falta de madurez física y mental, necesita protección y cuidados especiales, incluso la debida protección legal, tanto antes como después del nacimiento”.
La gran pregunta es, ¿cómo instrumentarlo?
